Para los contemporáneos de Jan Van Eyck, la llegada de la primavera era motivo de alegría. Después de la Pascua se permitía de nuevo el consumo de carne, queso, mantequilla y huevos. Gante le debía su deliciosa gastronomía a los prados abundantes donde pastaban las vacas y las ovejas. La llegada del mes de abril significaba el fin del periodo de escasez.

¿Sabía que…? El actual puente Leiebrug, que conecta la calle Zuivelbrugstraat con la calle Meerseniersstraat, se llamaba Suvelbrug (puente de los lácteos) en el año 1476 porque daba a la plaza Vrijdagmarkt, donde se vendían productos lácteos.

El origen medieval de nuestros productos lácteos

Abundan las recetas  de la Baja Edad Media en las que se utiliza queso, leche, mantequilla o huevos. Los libros de cocina de la época ya incluían recetas para quiche con queso y hierbas aromáticas, galletas preparadas con leche o queso, o huevos escalfados teñidos de todos los colores que se puedan imaginar. Un libro de cocina alemán de finales del siglo XV incluso contenía una receta para hacer huevos 
asados. Para elaborarlos, primero se extraían la yema  y la clara del huevo, se teñían y se mezclaban con panceta  y perejil. A continuación,  se rellenaban las cáscaras vacías con esta mezcla y se asaban al fuego. Hoy en día, la quiche sigue siendo un plato popular y las galletas  de queso también han  sobrevivido el paso del tiempo como snack de aperitivo.

Comience usted mismo

Galletitas de queso crujientes

+/- 75 unidades:

  • 240 g de harina
  • 250 g de mantequilla a temperatura ambiente
  • 40 g de fécula de patata
  • 60 g de azúcar glas
  • 160 g de queso curado
  • 10 g de yema de huevo cocido
  • 3 g de sal
  • Utensilios: Cortador de galletas redondo

 

  1. Amase todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
  2. Extiéndala hasta obtener un grosor de aproximadamente 0,5 cm.
  3. Déjela reposar durante al menos 6 horas en el frigorífico.
  4. Corte las galletas con un cortador redondo.
  5. Hornéelas en un horno precalentado a 160°C durante aproximadamente 10 – 14 minutos.
  6. Déjalas enfriar en una rejilla

Quiche

Receta básica para una persona

  • Masa quebrada u de hojaldre, suficiente para cubrir el molde
  • 1 dl de leche p.p.
  • 1 dl de nata p.p.
  • 2 huevos p.p.
  • una pizca de sal y pimienta
  • 30 g de queso semicurado o de queso de oveja fuerte p.p.
  • 10 g de hierbas aromáticas: perifollo, eneldo, apio, verdolaga, acelga… p.p

 

  1. Precaliente el horno a 200°C.
  2. Cubra el molde engrasado con la masa, corte los bordes sobrantes y pinche la base con un tenedor.
  3. Ralle el queso y distribúyalo por la base.
  4. Mezcle la nata con la leche e incorpore los huevos. Bata bien la mezcla. Salpimente al gusto. Vierta la mezcla de huevo sobre el relleno.
  5. Hornee la quiche durante unos 35-40 minutos hasta que se dore.
  6. Sirva con una guarnición abundante de hierbas aromáticas.
  7. Puede acompañar la quiche con una ensalada de berros, caléndula y alcaparras.